El Concurso de Romanceros toma este martes el relevo del Carnaval en San Fernando

San Fernando/El Carnaval de San Fernando cederá este martes el testigo a la que en los últimos años se ha convertido en una de sus citas más populares: el Concurso de Romanceros, que alcanza ya su mayoría edad con su 18ª edición.

Buena prueba de esa buena salud que tiene esta risa con la faceta más humorística de las fiestas del Carnaval es la elevada participación que se ha alcanzado este año con hasta 18 inscritos, lo que ha obligado al Ayuntamiento de San Fernando a dividir en dos sesiones el concurso. Ambas darán comienzo a las 19.00 horas en las instalaciones municipales del centro de congresos Cortes de la Real Isla de León (calle Real, 83) siguiendo el siguiente orden:

Martes, 21 de febrero

• La candidata
• El conquistador
• Kadizko Bertsolariak
• La verdadera historia de los padres de Hitler
• El hombre que le susurraba a la berza
• El misántropo
• El mensajero
• Ojú ke caló, el romancero que nadie había pedido
• Pon más carne

Miércoles, 22 de febrero

• Lo que me sale del coño
• Las aventuras de Clotildo El Babeta, el dios de la cerveza
• Traemos aquí cera pa tol que quiera
• Los caraviñeros, policía caletera
• Paconan: The Barbatian
• Los sonotones sordos, sordos de cojones
• Quillo, relativiza un poco
• Por el culo de la hinco
• Te voy a dar un buen viaje

El Ayuntamiento isleño ha establecido tres premios y el premio al cartelón. El primer premio consistirá en 470 euros, el segundo 295 euros, el tercero 235 y el premio al cartelón, dotado de 118 euros.

Los romanceros son de temática libre y de carácter humorístico. Deberán estar escritos mayoritariamente en octosílabos y que rimen al menos los pares, aunque se reconocerá cierta flexibilidad métrica por el carácter no profesional del concurso.

Los romances deberán llevar entre 40 y 70 cuartetas y su duración no deberá exceder los quince minutos desde la puesta en escena.

El participante deberá acudir disfrazado de acuerdo con el tipo de romancero y deberá asistir con el cartelón y la vara correspondiente, pudiéndose ayudar con un acompañamiento para el desarrollo de su repertorio. La técnica de la confección del cartelón será libre.