La deuda municipal se rebaja hasta los 32,7 millones de euros

San Fernando/La deuda viva del Ayuntamiento asciende a 32.779.381,67 euros, según los datos procedentes de la liquidación del último ejercicio presupuestario que la próxima semana irá a pleno. Se trata, con diferencia, de la más baja que se ha anotado en los últimos años y consigue rebajar el dato de deuda por habitante de 427 a unos 341 euros.

De hecho, la deuda del Ayuntamiento a 31 de diciembre de 2017 está casi 20 millones de euros por debajo de la que se registró en el año 2013, cuando subió hasta los 51.227.576,22 euros a causa, especialmente, de las operaciones de crédito que tuvieron que concertarse desde el Ayuntamiento para hacer frente al plan de pago a proveedores. Aunque fue el año 2012 el que registró la cifra más elevada de la década con una deuda de 56.171.079,57 euros.

En 2011, no obstante, la deuda era de 42.208.530 euros, un dato muy similar al que se registró en la liquidación de los presupuestos municipales de 2016: 40.932.001,21 euros. Esta cifra de los 40 millones de euros de deuda es, de hecho, la que responde a la dinámica más habitual del Ayuntamiento isleño.

Y en 2017 se consiguió rebajar la deuda en más de ocho millones de euros, a lo que se sumó -explica el concejal de Presidencia y Desarrollo Económico, Conrado Rodríguez- que no fue necesario suscribir ninguna operación de préstamo nueva ya que se habían realizado con anterioridad para ejecutar las distintas inversiones que están previstas. Es lo que ha ayudado a rebajar sustancialmente la deuda municipal hasta llegar a esta cifra de los 32 millones de euros.

Ahora, advierte este edil, parte del remanente de Tesorería -en total será 1.100.000 euros- se destinará a la amortización anticipada de créditos, lo que ayudará todavía más a mejorar los niveles de deuda del Ayuntamiento. De hecho, calcula este edil, antes de verano el Consistorio podría bajar su deuda de los 30 millones gracias a esta nueva operación que se llevará a cabo unida al ritmo habitual de pago durante los primeros seis meses del año.

Para el equipo de gobierno constituye una prioridad política hacer frente a los préstamos que se suscribieron en el anterior mandato para hacer frente al plan de pago a proveedores y abonar los más de 20 millones de euros que se les adeudaban. Estos créditos -recordó Conrado Rodríguez- no expiran hasta el año 2023 y sus condiciones, advirtió, no son especialmente ventajosas para el Ayuntamiento una vez concluidos los tres primeros años de carencia. De ahí que se intente adelantar todo lo posible su terminación y se aproveche el remanente para adelantar los pagos. La situación económica del Consistorio -insistió- lo permite sin dejar a un lado las inversiones.

La liquidación del ejercicio presupuestario de 2017 se ha saldado también con un superávit presupuestario de 7,5 millones de euros, según dio a conocer el equipo de gobierno hace unos días.