El gobierno local consolidará la policía de barrio con el aumento de la plantilla

Las diez personas seleccionadas en el proceso para cubrir las plazas nuevas de turno libre de la Policía Local ya han terminado la fase teórica de la formación previa que deben realizar para su incorporación al cuerpo. A finales de febrero, calculan desde el equipo de gobierno, se unirán a los agentes existentes para completar este periodo formativo con la parte práctica. Eso supone que a mediados de año, en torno a la Feria del Carmen y de la Sal, podrían integrarse definitivamente en la plantilla. Su incorporación además permitirá implantar en buena parte de la ciudad la policía de barrio, que tan buenos resultados está cosechando en la fase piloto en la que está inmersa. "Muestra la eficacia directa de la Policía Local", apunta el concejal de Seguridad Ciudadana, Jaime Armario.

Normalmente, tras la criba de las pruebas a las que se someten los aspirantes a estas plazas de Policía Local, los seleccionados deben cumplir un periodo estipulado en Andalucía de 1.300 horas formativas. Acuden para ello a la Escuela de Seguridad Pública de Andalucía (ESPA), situada en Aznalcázar (Sevilla), aunque existe otras escuelas delegadas -como en Cádiz- donde se pueden desarrollar ésta y otras actividades para completar la formación de nuevos y veteranos agentes. Los futuros policías municipales de la plantilla de San Fernando ya han pasado la primera parte del aprendizaje, aunque queda la fase de adiestramiento sobre el terreno que comenzarán en torno a marzo. Los cálculos municipales son que esta decena de personas entrarán a formar parte de la plantilla aproximadamente a mediados de año. Eso supondrá que estén disponibles para la Feria y que, entre otras cosas, la organización de los turnos sea más fácil a partir de ahora, especialmente para la puesta en marcha definitiva de la policía de barrio.

Hasta el momento, esta policía de proximidad se ha instaurado plenamente en la barriada Madariaga, con alcance a Reyes Católicos y la barriada Olmo. En los primeros dos meses, los resultados fueron tan positivos que, desde el equipo de gobierno, se habla de "eficacia directa de la policía local", "de herramienta útil". Entre el 50 y el 60% de las denuncias primeras que hacen los ciudadanos se resuelven inmediatamente, explicaba Armario. La mayoría del otro porcentaje se soluciona en el trámite. "Esto nos está permitiendo mejorar tanto en tema de medio ambiente, en civismo, en la resolución de conflictos en el barrio", añade el concejal de Seguridad Ciudadana.

Ya comenzó a mantener un contacto directo con la barriada de La Ardila, Blas Infante y barriada Andalucía otra pareja de agentes, que hacen visible su presencia en la zona acudiendo a la salida de los alumnos de los centros educativos. "Una asociación de madres y padres de alumnos me decía el otro día que cuando el policía iba al principio pensaban que era para poner multas y ahora se está convirtiendo -ante ese trabajo en los colegios, en los pasos de peatones- en uno más del barrio. Es la idea", reconoce el responsable de este cuerpo de seguridad de La Isla. "La experiencia es muy positiva. Estamos muy satisfechos en el equipo de gobierno, pero también la ciudadanía -vecinos, entidades, asociaciones, comerciantes-. Te demandan que no se vayan. el efecto de que estén en la zona es muy positivo", defendió el edil socialista.

A este trabajo en las barriadas se suma la atención concreta en hasta once centros educativos que se puso en práctica en noviembre, en la entrada y salida de los alumnos, para regular el tráfico, y en el que también intervienen la pareja de agentes de barrio reforzados por otros compañeros.

Por el momento, analizan cómo evoluciona este servicio a la ciudadanía y comprueban la mejor manera de consolidar la iniciativa en el futuro. Precisamente el nuevo área donde una nueva pareja de agentes patrullará para conocer y solucionar los problemas del barrio se extenderá desde la avenida Manuel de Falla, incluyendo los Mil Colores, el mercado de San Antonio, hasta el Carmen.

Armario aprovechó sus explicaciones para felicitar a la dirección de la Policía Local por haber sabido cuadrar los turnos de trabajo: han conseguido hacer una buena política para hacer la policía de barrio; "Eran los primeros que querían ese cambio por lo que supone para la imagen y la relación del cuerpo con la ciudadanía". El cambio se está realizado y "los propios policías están contentos", por lo que su continuidad se estudia "con mucho cariño", también porque se trata de un compromiso del gobierno municipal.