Protesta por impagos de trabajadores de Ainair, empresa auxiliar de Navantia San Fernando

San Fernando/Trabajadores de la empresa Ainair se han concentrado esta mañana en la puerta de Navantia San Fernando por el impago de sus nóminas. El jueves ya hicieron visible, en la movilización que protagonizó la plantilla de la compañía naval, su preocupación por la situación de la compañía de Vizcaya que se encarga de la fabricación y montaje de bloques de la patrullera de altura que se construye en el astillero isleño para Marruecos, y que ahora mismo está paralizada.

"Son unos 90 trabajadores en San Fernando", apunta Manuel Balber, de la Coordinadora de Trabajadores del Metal (CTM). "No han cobrado, y la empresa no puede hacer frente a los pagos, por lo que puede entrar en concurso de acreedores", advierte. Algo, señala, que puede afectar a empresas subcontratadas por la propia Ainair, por lo que pueden sumarse nuevos problemas para los profesionales del sector. La empresa formaba parte de la lista de morosos publicada por la Hacienda de Vizcaya a fecha de 31 de diciembre de 2023, de la que se han hecho eco varios medios en estos meses, con una deuda de más de un millón de euros.

Los trabajadores de Ainair se encuentran ahora mismo parados, lo que paraliza a su vez la actividad en la antigua Bazán y puede afectar a la planificación existente para la patrullera encargada por Marruecos, la única carga de trabajo con la que cuenta división de Producción de la factoría isleña, y, por tanto, a los plazos de entrega. La empresa vizcaína tiene adjudicado un contrato de más de 6 millones para la fabricación y montaje de bloques de este buque. Ya, anteriormente, obtuvo varios paquetes de trabajo del programa de las corbetas para Arabia Saudí. Desde Navantia aseguran que trabajan para que todos los programas transcurran con la mayor normalidad posible.

"Es la cuarta empresa con problemas", advierte el líder sindical, que critica que Navantia anteponga adjudicaciones por el precio más bajo frente a otras opciones que ofrezcan más garantías, entre ellas el cumplimiento de los derechos de los trabajadores y de los plazos de entrega "y que no haya conflicto en la puerta". Por el momento, solo se ha producido el impago de una nómina, pero al personal le preocupa que se repitan situaciones anteriores, "de empresas que se quitan de enmedio y dejan colgados los salarios de los trabajadores".