Las obras de la parada del tranvía en Río Arillo superan el 60% de ejecución

San fernando/Son las últimas obras del tranvía y también -dado su emplazamiento- las que están pasando más desapercibidas para la ciudadanía. Aunque la actuación, una inversión que supera los 2,6 millones de euros, no es precisamente de las más sencillas. La construcción del apeadero intermodal que se está habilitando en Río Arillo, en los límites del término municipal isleño y justo antes de que la plataforma tranviaria se conecte con las vías del tren, alcanza ya el 62% de su ejecución.

En la primera fase de la puesta en funcionamiento del tren-tranvía de la Bahía será el punto final del trayecto entre Chiclana y La Isla. Aquí, los pasajeros del tranvía tendrán que apearse para continuar su trayecto en un tren de Cercanías hasta Cádiz mientras el tranvía no complete el recorrido hasta llegar a Cádiz, lo que llegará posteriormente en una segunda fase. Pero este apeadero permitirá también incorporar a los vecinos de Chiclana al circuito que recorren los Cercanías para poder desplazarse no solo a Cádiz sino también a otras localidades de la Bahía y hasta Jerez y el aeropuerto. De ahí que desde la Agencia de Obra Pública de Andalucía, que es la encargada de coordinar el proyecto del tren-tranvía, se insista en la relevancia de esta parada intermodal y adviertan de la incidencia que seguirá teniendo en el futuro, cuando el tranvía al fin llegue hasta Cádiz.

La obra de Río Arillo, por su parte, presenta unas características que la hacen única. De hecho, no existe nada igual en toda España. Es la primera vez que se construye algo así: una parada de tranvía que abraza la vía férrea, lo que obliga en su ejecución a ajustarse a otros criterios técnicos y a las dimensiones ferroviarias. No es un andén más del tren-tranvía como los que se pueden ver en la calle Real o en el nudo de La Ardila. Es más bien un apeadero de tren, una estructura capaz de dar cabida tanto al tranvía como a los trenes convencionales, de mercancías y a las altas prestaciones de Renfe. La altura de los andenes sobre el carril es de 68 centímetros y la separación entre el eje de las vías y el borde del andén permite el paso de trenes circulando a más de 120 kilómetros por hora, según la instrucción de gálibos de la Red de Ferrocarriles de Interés General del Estado.

Los andenes cuentan así con 200 metros de longitud útil frente a los 60 lineales que son habituales en las paradas del tranvía. Los anchos son de 5,47 metros en el primero de estos andenes y de 6,17 en el segundo. Entre uno y otro se sitúan las vías de Adif para el paso de los trenes de Sevilla-Jerez-Cádiz. Por la parte exterior discurren las vías del tranvía que recorre el trayecto entre Chiclana y Cádiz, puesto que esta parada está situada justo antes de que confluyan las vías de ambos medios de transporte.

El paso entre los andenes se llevará a cabo a través de una pasarela peatonal metálica que empezará a levantarse en los próximos días y a la que se accederá mediante escaleras y un ascensor en ambos lados. Esta estructura, que discurrirá a una altura de ocho metros sobre las vías, es la que permitirá el trasbordo de pasajeros del tranvía a los Cercanías y viceversa. La pasarela ya se ha fabricado y está prevista su llegada desde talleres para dar comienzo a su colocación en cuestión de días. Por otro lado, ya se ha concluido la cimentación necesaria tanto para los ascensores como para la estructura de la pasarela.

Además, esta misma semana se han terminado de hormigonar los andenes de esta nueva parada intermodal. Se han colocado los muros y se ha llevado a cabo una cimentación aligerada debido a las características del terreno. Próximamente se colocarán también las marquesinas, cuyo diseño introduce una serie de cambios para asemejarse también a las de Adif.