Las cofradías de Cádiz aportan cuatro furgonetas con ropa para Elcano y más de 2.500 euros para la lucha contra el coronavirus
Han abierto dos casas de hermandad y organizado una colecta virtual para conseguir estas donaciones
Las cofradías de Cádiz se han unido para colaborar con la ciudad en medio de la epidemia del coronavirus. Y con este objetivo acaban de finalizar la primera acción conjunta para atender las necesidades más urgentes. En concreto, han reunido donaciones de ropa y económicas para colaborar con diversos fines.
Para las personas sin hogar que desde el inicio del estado de alarma están reagrupadas en el centro náutico Elcano han recolectado hasta cuatro furgonetas de ropa que este martes ha sido enviada a sus beneficiarios. Dos casas de hermandad (la de la Pastora de Trille, en la Avenida del Guadalquivir, y la de La Palma, en el Corralón de los Carros) han servido de sede para recibir durante las tardes del pasado viernes y del lunes 30 la ropa que los propios cofrades y la ciudadanía en general ha querido donar, atendiendo así a la llamada de colaboración que dirigía a las hermandades el Ayuntamiento de Cádiz. En total, las bolsas y maletas recaudadas han llenado cuatro furgonetas del propio Consistorio, que se han encargado de trasladar la ropa para cumplir con los protocolos sanitarios.
Además, las propias hermandades han tomado la iniciativa de realizar una especie de colecta virtual para recaudar un primer fondo con el que colaborar con varias entidades. En total, se han ingresado más de 2.500 euros, que se destinarán a Cáritas Diocesanas (para colaborar en esa campaña de recaudar fondos con los que poder atender las necesidades que surjan a consecuencia de esta epidemia y sus devastadores efectos en la economía y el empleo) “o a otras organizaciones asistenciales que nos pida ayuda a las hermandades”, según traslada el presidente del Consejo, Juan Carlos Jurado.
La doble respuesta del mundo de las cofradías ha sido, por tanto, rápida y unánime. Además, la aportación económica que llega desde el mundo de las hermandades coincide en el tiempo con la contrariedad que supone haber suspendido los desfiles procesionales, que conllevará a una problemática económica que las hermandades siguen estudiando cómo solucionar (al perder prácticamente todos los ingresos que perciben por sus salidas pero tener que afrontar buena parte de los gastos).
Además, estas acciones conjuntas se suman a otras que a nivel particular están realizando muchas corporaciones en el plano social y asistencial en estos días de confinamiento en los hogares y de epidemia.
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