La Merced matiza la convocatoria para la salida procesional del Nazareno de la Obediencia

Los planes de la cofradía de la Merced para celebrar la primera salida procesional del Nazareno de la Obediencia el Sábado de Pasión de 2023 se han frenado en seco. La incorporación a la Semana Santa que la hermandad daba por hecho el miércoles ha variado sensiblemente en apenas 24 horas, rectificando la junta de gobierno los términos de la convocatoria del cabildo extraordinario del próximo 7 de enero, que ahora se antoja un paso fundamental de cara a ese objetivo de procesionar.

Así, la hermandad ha rectificado la convocatoria del cabildo, que pasa de ser meramente informativo (lo que confirmaba la salida en la jornada del Sábado de Pasión) a ser también deliberativo. Eso significa que los hermanos convocados el 7 de enero tendrán que decidir respecto al inicio de los trámites para que el Nazareno de la Obediencia procesione el Sábado de Pasión de 2023 y 2024. Es decir, que en caso de que no se apruebe en el cabildo, la posibilidad quedará automáticamente suspendida.

Además, la convocatoria ha añadido un segundo punto que contempla a las claras la posibilidad de que no sea en 2023 cuando se produzca la primera salida del Nazareno de la Obediencia. Y es que los hermanos estudiarán la opción de solicitar a la autoridad eclesiástica, si no se aprueba a tiempo la salida, que el vía crucis que habitualmente preside la imagen sobrepase los límites de la feligresía, ya que la intención es hacer estación en la Catedral.

Por último, también tendrá que ser sometido a cabildo la aprobación del hábito penitencial, que como ya adelantara el hermano mayor, Gabriel Parodi, repetirá la vestimenta propia de la orden mercedaria (túnica y escapulario de color blanco roto) incorporando antifaz del mismo color con el escudo de la orden en el pecho.

Con estos cambios realizados en la convocatoria 24 horas después de anunciar el primer cabildo, se diluye considerablemente la opción de que la hermandad se incorpore a la Semana Santa en 2023. Todo ello teniendo en cuenta además que para esa salida restan menos de 100 días, en los que deberían cumplimentar todos los trámites oportunos en las instancias episcopales (Consejo de Hermandades y Delegación Diocesana, principalmente) además de confeccionar a tiempo las túnicas y lograr la cesión del paso en el que procesionaría la imagen.

De no ser así, todo apunta a que la primera procesión del Nazareno de la Obediencia será el Sábado de Pasión de 2024. Y para esta próxima Cuaresma, la hermandad se conformaría con volver a celebrar el habitual vía crucis de la imagen (en andas en lugar de paso y sin música de banda), en esta ocasión con un recorrido que sobrepase la feligresía.