Nuevo robo en la iglesia de San Francisco de Cádiz
Sustraen a la Virgen de la Esperanza del Nazareno del Amor una cadena, un broche y un ancla
Todos los indicios llevan al mismo autor de los últimos robos
Las iglesias de Cádiz, y especialmente la iglesia de San Francisco, están en clara desventaja respecto a la seguridad y los actos vandálicos contra el patrimonio, principalmente el de las hermandades. Un nuevo episodio ha tenido lugar en estos días, con un robo que en esta ocasión ha sufrido la cofradía del Nazareno del Amor.
El pasado lunes, 12 de junio, una persona sustrajo varias joyas que tenía expuestas la Virgen de la Esperanza, titular de esta hermandad del Lunes Santo. En concreto, desapareció una cadena que tenía prendida de una de las manos, un broche con el nombre de Esperanza y un ancla. En el plano positivo, según ha comunicado la propia hermandad, no ha habido que lamentar daño alguno en la imagen de la Esperanza, como sí ocurrió a principios de año en la Virgen del Rocío de la parroquia de San José.
La Policía Nacional ya está detrás de los hechos, que según ha podido saber este periódico habrían sido cometidos por el mismo autor que presuntamente actuó hace semanas también en San Francisco, sustrayendo unas joyas a la Virgen de los Desamparados del Caído mientras estaba expuesta a la veneración en la capilla de Vera-Cruz, y en San Antonio, donde fue sorprendido mientras sustraía una cadena de otra imagen del templo. La misma persona, además, fue la responsable de los daños sufridos por la Virgen del Rocío el pasado enero en un nuevo robo.
Pendiente ahora de recuperar esas joyas perdidas, San Francisco parece ser foco de interés de este tipo de hurtos y actos vandálicos. No en vano, en la capilla de Vera-Cruz parece que hubo hace unos días un intento de robo de uno de los cepillos, que fue forzado sin éxito.
No obstante, estos hechos se extienden por otras iglesias de la ciudad. En Santo Domingo, por ejemplo, hace también varias semanas se detectó la ausencia de una cadena que colgaba del Sagrario, que sería rápidamente recuperada y que también habría sido sustraída presuntamente por el mismo autor, un joven perfectamente localizado por la Policía Nacional.