El cartel de la Semana Santa de Cádiz 2023: El simbolismo más allá de la pintura
El cartel de la Semana Santa de Daniel Franca esconde muchas curiosidades
El artista Pintarraheo y el diseñador Ale Rojas también han participado en la obra
El cartel de la Semana Santa de Cádiz 2023 ha cumplido a la perfección su primer cometido como vocero, como anuncio: llamar la atención. Desde el momento en que el presidente del Consejo de Hermandades y la concejala de Cultura y Fiestas descubrieron el lienzo en el acto celebrado el jueves en la iglesia de Santiago, se han destapado también todo tipo de opiniones, comentarios y valoraciones sobre la obra de Daniel Franca, que no ha dejado indiferente a nadie (cofrades y no cofrades).
El también pintor Antonio Álvarez del Pino se atrevió a decir que el de Franca es “el mejor cartel -junto al del pasado año de Antoine Cas- que ha tenido Cádiz nunca”. Y más allá de la técnica y la exquisitez artística lograda, la llamativa obra que preside el Cristo de la Buena Muerte esconde muchas curiosidades que evidencian la genialidad lograda por el autor.
Bajo la aparente sencillez de una fachada desconchada y pintarraqueada de Cádiz, Franca explicó en la iglesia de Santiago su intención de representar el tiempo. El tiempo de una ciudad “por tres veces milenaria” y el tiempo que transcurre de Carnaval a Cuaresma y de ahí a la Semana Santa, al Viernes Santo, a la procesión de la Buena Muerte, cuyo rostro “emerge por encima de toda esa amalgama de trozos de papel y desconchones”, explicó el autor, que aseguró que plantarse ante este portentoso Crucificado de San Agustín “produce el mismo desconcierto y asombro que cuando se está delante de Las Meninas de Velázquez”.
Franca ha querido también representar la antítesis del bullicio y jaleo de la fiesta que precede a la Cuaresma, tiempo mucho más de vivencia interior. Contrastes entre el Carnaval, que representa con parte del cartel que pintara Eduardo Arroyo en 2005 (de varios antifaces sobre fondo amarillo) para anunciar la fiesta de febrero, y la Cuaresma representada en esas convocatorias de cultos ajadas, entre las que se lee especialmente la palabra soledad. “A la izquierda la palabra Carnaval, a la derecha la antítesis: Soledad”, resume Franca, que ha asumido la valentía de incorporar el Carnaval al anuncio de la Semana Santa, apostando por superar antiguas barreras que buscan distanciar una y otra celebración. “He sido testigo de lo ecléctico de esta ciudad, de cómo pasa de una comparsa a una saeta con la misma pasión, sentimiento y devoción”, confesó el pintor sobre la ciudad.
Ese cartel de Carnaval elegido no es casualidad, ya que el amarillo predominante le sirve al artista para expresar el color “símbolo de esta ciudad, el color del oro y de la luz del sol, amarillo de felicidad, espíritu y energía, de su equipo de fútbol, de su gente… en definitiva, símbolo rotundo de la idiosincrasia de esta por tres veces milenaria ciudad”.
La letra es otro elemento fundamental en esta obra de Franca, que considera el cartel como “una conjunción perfecta entre imagen y letra”. Y para ello, el pintor se ha apoyado en otro dos artistas para incorporar los textos al anuncio de la Semana Santa.
De un lado, interviene en el cartel el artista urbano de Sevilla Pintarraheo, que ha bautizado ese modo de escribir, una especia de idioma andaluz que plasma en un gran número de obras e incluso en prendas de vestir y otros objetos. “Señor de los espacios infinitos” es la frase elegida por Pintarraheo para el cartel de Cádiz, extraída de la canción Todo es de color, de Lole y Manuel. “Señor de los espacios infinitos, Tú que tienes la paz entre las manos, derrámala Señor te lo suplico y enséñales a amar a mis hermanos”, dice la canción escrita por Manuel Molina y Tele Palacios.
De otro lado, participa también en la obra el diseñador Ale Rojas, encargado de plasmar los títulos ‘Cádiz Semana Santa 2023’ y ‘Fiesta de Interés Turístico Nacional’ que estrena este año la Semana Santa. En esta composición recurre Rojas a un tipo de letra en primer lugar muy vertical, que evoca la espiritualidad ligada a la Semana Santa, y en segundo lugar alusiva al carácter marinero y portuario de Cádiz. ¿Cómo logra esto el diseñador sevillano? Utilizando la misma tipología de letra -Stencil, en concreto- “que se usaba para marcar toneles, botes, sacos, barcos o la propia señalización portuaria en suelos, talleres y naves”.
El muelle, el levante, el Carnaval, el amarillo, la calicha, la Cuaresma de cultos y proclamas, por tanto, cobran vida en esta pintura que se sirve del Cristo de la Buena Muerte para anunciar la Semana Santa, que no ha dejado a nadie indiferente y que esconde mucho simbolismo más allá de la aparente sencillez de una fachada desconchada.
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