Sentencia ya prepara la futura capilla de la Virgen del Buen Fin

En la cofradía de Sentencia se desarrollan los proyectos de calado uno detrás de otro. Tras la adquisición y adecentamiento de una segunda casa de hermandad en plena plaza de la Merced y la bendición del altar para la imagen titular, la corporación del Miércoles Santo ya prepara el espacio donde se levantará el retablo de la Virgen del Buen Fin, en la capilla situada bajo la torre de la Merced, nada más acceder al templo.

Después de aprobar el pasado junio el proyecto de altar por parte del cabildo de hermanos, en estos días se ha procedido a resanar la capilla cedida por la parroquia, para eliminar los restos de humedad. Unos trabajos que conllevan el picado de las paredes y posterior revestimiento con mortero de cal, así como la sustitución de la instalación eléctrica y de la iluminación.

Una vez realizada esta intervención, Sentencia esperará la autorización final del Obispado para que el tallista conileño Juan José Rosado comience la ejecución del nuevo retablo diseñado a semejanza “del estilo protobarroco siguiendo las líneas arquitectónicas de la parroquia”. A este respecto, precisa la hermandad que la comisión de patrimonio del Obispado ha otorgado ya una autorización provisional, pendiente precisamente de esas labores de saneamiento de la capilla que propiciarán la aprobación definitiva para realizar el retablo.

Tal y como presentó en su día la junta de gobierno que preside Alfonso Cañuelo, el retablo será concebido en varios pisos o niveles. Tendrá una mesa de líneas rectas, con molduras y pilastras, figurando en su parte central “un tondo decorado con talla ornamental”. Sobre ella irá una hornacina central para albergar a la Dolorosa, ornamentada con un moldurón tallado y flanqueada por dos pilastras decoradas con festones de flores, y adosadas a estas a modo de orlas laterales, sendos remates de roleos de acanto. Estas orlas están rematadas por un segundo cuerpo con jarras barrocas, torneadas y talladas. Por último, la parte superior del retablo estará rematada por una cornisa con decoración tallada, sobre la que se dispone un frontón curvo roto, que guarda relación con la fachada de la parroquia. El tímpano se remata con una talla a modo de cartela central, con decoración de roleos vegetales de acanto. En su parte central el escudo de María.

Los materiales empleados serán madera de pino de Flandes revestido de tableros marinos para la estructura de madera y madera de cedro para las tallas y molduras. La terminación será lacada con imitación a mármoles al oleo y las tallas y molduras revestidas con pan de oro, a semejanza del retablo del Señor de la Sentencia.

Todo ello se pretende que esté culminado en diciembre, con el objetivo de bendecir este nuevo retablo de la Merced el día 8, fiesta de la Inmaculada, que es cuando la hermandad celebra la función de los cultos a la Virgen del Buen Fin.