¿Cómo se concede una coronación canónica en Cádiz?

La cofradía de Expiración quiere iniciar los trámites para solicitar la coronación canónica de la Virgen de la Victoria. Y una vez que lo haga, se pondrá en marcha una maquinaria que está perfectamente definida en la diócesis de Cádiz y Ceuta, ya que en el año 2004 el entonces obispo Antonio Ceballos emitió un decreto que recoge la normativa relacionada con estas distinciones canónicas.

Conviene reseñar que según las normas dictadas en 1983 por la Congregación para el Culto Divino, es el obispo de la diócesis el que decide sobre la oportunidad de coronar a una imagen de la Virgen, estableciendo en este sentido un criterio general: "Téngase en cuenta que solamente es oportuno coronar aquellas imágenes que, por la gran devoción de los fieles, gocen de cierta popularidad, de tal modo que el lugar donde se veneran hayan llegado a ser la sede y como el centro de un genuino culto litúrgico y de activo apostolado mariano".

Con todo esto presente, el proceso diocesano para coronar a una imagen se inicia con la petición dirigida al obispo; cuestión que no corresponde a la cofradía, sino al párroco o "alguna institución eclesiástica", y que debe incorporar "las razones pastorales por las que se pide la coronación".

Será el obispo el que apruebe esta primera fase, nombrando a un delegado para que elabore un detallado informe sobre esa solicitud, en caso de que al recibir el escrito considere que es posible efectuar esa coronación canónica. El informe que hay que elaborar se centrará en la historia de la imagen y su devoción, en su valor artístico y en el templo donde recibe culto (incluyendo qué culto concreto se dedica allí a la imagen "y qué apostolado mariano se realiza").

Todo este expediente se trasladará nuevamente al obispo, que tendrá en sus manos un segundo pronunciamiento sobre la coronación. Si ve razonable el informe presentado por el delegado, solicitará el parecer a una serie de órganos diocesanos: sacerdotes, consejo pastoral del Arciprestazgo que corresponda a la imagen, consejo pastoral de la parroquia donde recibe culto la imagen, Consejo de Hermandades y Delegación Diocesana de Hermandades.

Será tras conocer el pronunciamiento de todos estos grupos cuando el obispo adopte una tercera decisión respecto a la coronación. Y en caso de que la decisión sea favorable, el proceso seguirá su curso comunicando a la cofradía que inicie los preparativos establecidos en una segunda fase.

Es el turno de la cofradía, que tras recibir la indicación del obispo tendrá que presentar un proyecto catequético "con el fin de preparar a la comunidad" para la coronación, que deberá ser trasladado al Secretariado Diocesano de Catequesis; un proyecto artístico, con el correspondiente presupuesto, sobre la corona, que deberá estudiar el Secretariado Diocesano de Patrimonio; un proyecto social o benéfico "como signo de caridad fraterna", que se remitirá a la Delegación de Acción Socio-Caritativa; y un proyecto respecto a la celebración "en el que se indicará el lugar, la fecha y aquellos elementos que hagan posible la sencillez y austeridad del acto, así como la participación de los fieles", que será enviado al Secretariado Diocesano de Liturgia.

Tanto el proyecto como los informes de cada Secretariado se entregarán nuevamente al obispo, que tomará entonces la decisión definitiva respecto a la coronación, emitiendo el correspondiente decreto en caso de que, por cuarta vez, considere que la solicitud cumple todos los requisitos y exigencias.

Una norma andaluza

Por ahora es este el procedimiento que en la diócesis está vigente. Pero los obispos de Andalucía y los responsables diocesanos de Hermandades están proyectando la redacción de una normativa que sea común en toda la comunidad, de manera que no haya distinciones o criterios dispares entre una diócesis y otra.

Esta iniciativa se enmarca dentro de esa intención de unificar criterio respecto al mundo de las hermandades en varios ámbitos: coronaciones, procesiones extraordinarias, formación o creación de nuevas hermandades. Y en ello trabajan actualmente las diócesis, como volvió a quedar de manifiesto en la reunión celebrada hace un mes por los responsables diocesanos en Antequera.