La hermandad de La Cena cambiará los faroles por candelabros en su paso de misterio

La hermandad de La Cena sigue rehaciendo su cortejo y mejorando el patrimonio que saca a la calle cada Domingo de Ramos. Tras el avance que en estos últimos años ha experimentado la ejecución del paso de misterio, la corporación ha anunciado ahora la sustitución de los faroles que iluminan las esquinas por candelabros de guardabrisas.

Será el próximo Domingo de Ramos cuando la hermandad estrene estos nuevos candelabros, que va a realizar el carpintero, tallista y dorador Daniel Sánchez Vázquez, de Isla Cristina; artesano que ya realizó este año el remate del nuevo guión de la cofradía. El propio Sánchez ha diseñado las nuevas piezas, que tendrán nueve puntos de luz cada una y que en algunos brazos cuelgan racimos de uvas.

El objetivo de la hermandad es que en 2025 se estrenen los nuevos candelabros que irán en las cuatro esquinas del paso; y en una siguiente fase, se proyectarán también dos candelabros más, de dimensiones más reducidas, que se colocarán en los dos laterales y que sumarán cinco luces cada uno. En total, el paso de misterio estará iluminado por 46 puntos de luz, a los que hay que sumar las otras dos luces que van en la mesa del propio misterio.

Estos candelabros sustituyen a los faroles que hasta este año han iluminado las esquinas del paso y que ya en el año 2008 fueron remodelados y plateados (ya que hasta entonces eran dorados).

Este trabajo que proporcionará una imagen bien distinta de por ahora el único paso de la cofradía dominica se suma a la culminación del dorado del canasto del paso, que también va a asumir Daniel Sánchez. La hermandad tiene pendiente rematar el dorado con la mitad trasera de uno de los laterales del canasto, así como culminar el baquetón y elementos menores de la trasera del paso; todo ello lo realizará este artesano de Isla Cristina, que sustituye así como dorador de La Cena a la sanluqueña Felisa García, que había trabajado en el paso estos últimos años.

Con estos trabajos por delante, en la hermandad tendrán que definir una vez que se dore todo el canasto y se culmine el proyecto de talla y dorado de los nuevos candelabros qué hacer con los respiraderos. Conviene recordar que el proyecto inicial planteaba unos respiraderos de talla de una altura considerable que en el año 2002 ya fueron reformados y que en 2006 serían definitivamente eliminados del paso, sustituyéndolos entonces por un proyecto de respiraderos bordados que solo acometió la primera fase con el frente del paso en 2013 y que tampoco han terminado de convencer a los hermanos.

El objetivo, o la intención, es hacer unos nuevos respiraderos que sean definitivos para el paso. No obstante, en la hermandad son conscientes de que de momento hay un recorrido marcado por el remate del canasto y la nueva iluminación del paso, que se suma a otros proyectos patrimoniales en los que anda inmersa la corporación tanto para seguir enriqueciendo su cortejo procesional como a nivel inmueble, con la compra que se está tramitando de la actual casa de hermandad de la calle Sopranis.