Un paño para 300 años

En la relación de museos de la ciudad pronto podrá anunciarse o recomendarse la Pinacoteca de la Verónica de Afligidos. La hermandad del Jueves Santo ha mantenido en los últimos años una bonita tradición –impostada de otros lugares que ya lo hacen, como Sevilla con la cofradía del Valle– de pintar cada año un nuevo paño para la Verónica del misterio. El reto está sirviendo para, por un lado, defender la apuesta de una pintura que poco a poco se abre paso en la Semana Santa de Cádiz ante tanta fotografía, ya que la cofradía elige cada año un pintor distinto; y por otro lado, está propiciando un enriquecimiento patrimonial importante a la corporación de la calle Sagasta.

El paño que ya se ha pintado para el Jueves Santo de 2019 es obra de Juan Antonio Sánchez Pacheco (estudiante de Conservación y Restauración en la Universidad de Sevilla y hermano de la sanluqueña hermandad del Soberano Poder), y cuenta con varios aspectos destacados. Representa en la parte central el rostro de Jesús de los Afligidos sin la corona de espinas y rodeado de una gran cartela barroca (con elementos que recuerdan al paso de misterio) que hace referencia a la cofradía, insertando motivos como los corazones de Jesús y María (anagrama de la hermandad), el escudo lasaliano (cuyo título ostenta Afligidos) o la imagen de San Lorenzo (cuyo rostro tiene el tamaño de una moneda de un céntimo y que reproduce la talla del altar mayor de esta iglesia, realizado con pinceles finos).

Otra obra de arte, en definitiva, que suma Afligidos en esa pinacoteca que crece cada año; en esta ocasión para coincidir con ese 300 aniversario fundacional que se dispone a conmemorar la hermandad en 2019.