Zaframagón: Un santuario para el turismo ornitológico

Es el reino del buitre leonado en Andalucía. Y la joya ambiental de la Vía Verde de la Sierra, el sendero que transita el antiguo trazado ferroviario Jerez-Almargen. La reserva natural del Peñón de Zaframagón, ubicada entre los términos de Olvera y Coripe, se erige como un reclamo para un incipiente turismo ornitológico, aquel que busca la observación de aves en su hábitat natural complementándolo con otras actividades de ocio y disfrute. De ahí, que la Fundación Vía Verde, como entidad gestora de esta ruta, haya puesto los cimientos para configurar este entorno como un atractivo turístico de peso, capaz de atraer a un segmento muy especial de visitantes.

Desde hace unos años, el Peñón de Zaframagón, ubicado en la Sierra, se está convirtiendo poco a poco en un punto de atracción para amantes de las aves, sobre todo, procedentes del extranjero y para familias con niños que quieren disfrutar de un ecosistema único en Andalucía. Y esto es por la presencia de la mayor colonia de buitres leonados que existe en la Comunidad Autónoma y en toda Europa occidental, con más de 220 parejas, que ocupan terrazas y oquedades de las paredes de este fantástico relieve montañoso. Este Peñón, con una protección ambiental desde 1989, está declarado también como Zona de Especial Protección de las Aves (ZEPA).

Aunque la Vía Verde de la Sierra se vende desde hace años por sí sola para la práctica del ecociclismo y el senderismo -nada más que hay que echar un vistazo a las 300.000 visitas que registraron en 2021 los ecocontadores ubicados en el trazado de este sendero de 36 kilómetros, que une Puerto Serrano con Olvera- empieza a despuntar un segmento turístico concreto ligado más al avistamiento y disfrute de la fauna y flora del lugar. Y ahí, la presencia de la colonia de buitres leonados juega un papel muy importante para el desarrollo del turismo ornitológico, que empieza a dar tímidos pasos, aunque aún no está extendido su conocimiento a la población general. De hecho, hace unos años y de la mano del Patronato Provincial de Turismo de la Diputación se organizó una visita con touroperadores europeos para incluir este destino dentro de su oferta.

“Cada vez vienen más visitantes. Se ven muchos extranjeros amantes de los pájaros. Pero creo que este recurso único necesita un empuje específico promocional para explotar sus valores y que llegue a más gente en el entorno de Andalucía ”, confiesa Francisco Menacho, quien fuera el presidente de la Fundación Vía Verde de la Sierra, desde 2003 a 2011, y bajo su mandato se realizaran el grueso de las infraestructuras como la rehabilitación de las antiguas estaciones de tren, que nunca llegarón a albergar a pasajeros y la adecuación de alojamientos para favorecer las pernoctaciones a lo largo de este trazado.

El Peñón de Zaframagón se declaró como Reserva Natural en 1989, lo que supuso un paso determinante para la conservación de las especies y la protección del lugar. Desde entonces actividades como la caza están prohibidas. Zaframagón se encuentra a mitad del recorrido de la Vía Verde: a unos 15 kilómetros de distancia de la estación de Olvera; a 21 Kilómetros de la de Puerto Serrano y a 6 de la de Coripe (Sevilla). De hecho, si no se quiere andar mucho a través del trazado habilitado de la vía férrea hay un acceso rápido y accesible para llegar al corazón del Peñón y disfrutar desde ahí de la presencia de buitres leonados y otras aves. Y es que desde Olvera se puede acceder por la carretera de la Muela hasta llegar a la antigua estación de Navalagrulla y el camino de Zaframagón. El visitante podrá dejar el vehículo en una explanada y recorrer 1,5 kilómetros a pie o en bicicleta hasta llegar al viaducto del Peñón, ubicación ideal para el avistamiento de los buitres, donde aguantará la respiración si tiene la fortuna de encontrase a esa hora bandadas de decenas de aves surcando los cielos. En la zona se puede visualizar, también águilas perdiceras y quebrantahuesos, entre otras especies.

Precisamente esta época es de las mejores para la observación. “Las mejores horas son las del mediodía cuando son más favorables las corrientes térmicas”, dice María Jiménez, la gerente de la Fundación de la Vía Verde de la Sierra.

La Junta de Andalucía tiene las competencias del espacio protegido de la Reserva Natural del Peñón de Zaframagón y es la encargada de realizar seguimientos de esta colonia de buitres para su conservación y protección. Entre sus tareas está el anillamiento de los ejemplares para controlar la población. En el último realizado se han contabilizado 220 parejas, según datos de la Fundación. Ha habido épocas que ha habido hasta 300 parajes. “Todo el que viene procura pasar por aquí. Está en el centro de la Vía Verde y es uno de los grandes atractivos”, cuenta María Jiménez.

Así que la Fundación de la Vía Verde, en su afán de potenciar este espacio privilegiado como un recurso de peso inauguró, en abril de 2007, el Centro de Interpretación y Observatorio ornitológico del Peñón de Zaframagón, en la antigua estación del ferrocarril de esta zona. Un espacio que presenta como principal atractivo un sistema de monitorización por vídeo vigilancia de las buitreras, con lo que cualquier persona puede disfrutar en tiempo real de la visión de los nidos y la actividad de los buitres que se encuentran en las cuevas y terrazas de esta gigantesca pared montañosa.

“Una cámara digital de alta sensibilidad, con rotación de 360º, permite conocer en tiempo real como vuelan, alimentan a sus crías y llegan a sus nidos los buitres leonados. La cámara está camuflada entre las rocas, en una zona de difícil acceso al otro lado del cañón del Guadalporcún, a escasos 200 metros de donde anidan los buitres en la falda más abrupta del Peñón”, explican en la Fundación. Tal es así que en 2021 pasaron por este observatorio unas 2.000 personas atraídas por la posibilidad de visualizar estos ejemplares únicos. De hecho, dicen los amantes de esta práctica que ahora es un momento ideal para la observación de polluelos en los nidos con los sistemas de cámaras instalados en el Peñón. “Se trata de un material especialmente respetuoso con el medio ambiente. La cámara cuenta con un zoom motorizado de 300 milímetros y un sistema de visión nocturna por rayos infrarrojos de gran capacidad y hasta 99 posiciones diferentes”, explica la Fundación.

La instalación de estas cámaras fue pionera en su día. Hasta entonces no era frecuenta poder ver en tiempo real la vida de estas aves en su hábitat natural. La Fundación se inspiró en una propuesta que se hizo en Arnedillo (Logroño), pero innovó la misma y la mejoró, como recuerda Menacho.

Por tanto, los visitantes que disfrutan de la Vía Verde tienen a su disposición este sistema para la observación de buitres y otras aves migratorias que se localizan en Zaframagón. “La ubicación y potencia del equipo permite llevar la señal a través de una red de fibra óptica hasta un equipo de reproducción y grabación digital situado a un kilómetro de distancia, ubicado en el Centro de Interpretación. Allí hay un teclado para el manejo a distancia de la cámara y una pantalla de plasma en la que se muestran las imágenes en tiempo real. Además, las grabaciones se pueden también ver en Internet a través del canal de Youtube de la Fundación Vía Verde de la Sierra”, explica la gerente de la Vía Verde.

Para dar un salto cualitativo, la Fundación tiene en cartera mejorar este año 2022 aún más este sistema con tecnología punta con una ayuda económica solicitada al Grupo de Desarrollo Rural.

El Observatorio ornitológico está abierto al público de sábado a miércoles. Las instalaciones albergan también una biblioteca, paneles interpretativos sobre la Reserva Natural, información sobre el buitre leonado y su entorno natural, así como de la Vía Verde de la Sierra, además de una tienda de recuerdos.

Pero, además, en su afán de consolidar el antiguo trazado del tren, que quería unir Jerez con Almargen y que nunca se puso en funcionamiento, como un recurso turístico de primer orden, la Fundación ha acondicionado el antiguo almacén de la estación de Zaframagón, como centro de recepción de visitantes y donde además hay una pequeña tienda de recuerdos y una cantina donde los fines de semana y festivos los visitantes podrán descansar, disfrutar de las impresionantes vistas e incluso degustar la gastronomía de la zona antes de continuar el camino. Este edificio es, además, la sede de la Asociación de Astronomía “Vía Verde dela Sierra (www.astronomiaviaverde.es), que organiza actividades de observación de estrellas en este espacio natural, con lo que se da un paso más para consolidar esta ruta como generadora de oportunidades económicas en la zona.

“El auge del turismo rural y la búsqueda de destinos turísticos más seguros y al aire libre ha traído consigo un aumento en el número de visitantes, con lo que está suponiendo un importante impulso económico para los negocios locales, especialmente los ubicados en plena Vía Verde como son los alojamientos, restaurantes, empresas de alquiler de bicicletas, que tan mal lo pasaron durante la época del confinamiento durante la pandemia”, dicen desde la Fundación Vía Verde de la Sierra.