El enésimo cambio con AstraZeneca despierta los recelos de expertos y comunidades autónomas

Madrid/El nuevo giro dado por el Ministerio de Sanidad a la vacunación de los menores de 60 años con AstraZeneca ha levantado duras críticas de expertos y de algunas comunidades que recelan del hecho de que se les vaya a exigir un consentimiento informado para poder completar la pauta con esta misma marca.

El asunto está en manos del Comité de Bioética de España, que este viernes tiene previsto dar una respuesta -que no es vinculante- a Sanidad sobre la consulta que le elevó sobre si es correcto desde un punto de vista ético aplicarles la segunda dosis de AstraZeneca y, en ese caso, si debe ser bajo consentimiento informado y cómo debería ser esta autorización.

Los miembros de organismo votarán este jueves el dictamen que ha preparado la ponencia, según han explicado a Efe fuentes del CBE; fue a las 09:20 cuando el departamento que dirige Carolina Darias se puso en contacto con ellos para preguntarles si sería posible recabar su opinión sobre este asunto, tras lo cual les remitió su consulta formal.

Una consulta que llegaba apenas unas horas después de que una Comisión de Salud Pública muy dividida aprobara el martes, con 10 votos a favor, 7 en contra y 3 abstenciones, que este grupo de personas, en su mayoría trabajadores esenciales de menos de 55 años, terminaran de inmunizarse con una segunda dosis de Pfizer.

Críticas de la comunidad científica

El último episodio en la vacunación con Vaxzevria (nombre comercial de AstraZeneca) ha sido duramente criticado por la comunidad científica y médica, que en buena parte ha reclamado desde siempre que estas personas debían ser inmunizadas con esta vacuna.

De esta forma, el presidente de la Asociación Nacional de Enfermería y Vacunas (ANENVAC), José Antonio Forcada, ha criticado en declaraciones a Efe este "nuevo error" y el "otro despropósito" cometido por la administración sanitaria de poner un segundo pinchazo de Pfizer. Un "segundo error" es darles a elegir a las personas si quieren que esa segunda dosis sea con Pfizer o AstraZeneca, lo que considera una "dejación de responsabilidad" y dejar la decisión "en manos de personas sin conocimiento científico suficiente para elegir una opción".

A juicio del también secretario de la Asociación Española de Vacunología (AEV), se ha tomado una "decisión totalmente política, alejada de la evidencia científica" y basándose en un "estudio pequeño, poco potente y poco consistente".

Se refiere a CombivacS, el estudio impulsado por el Instituto de Salud Carlos III cuyos resultados preliminares, presentados el martes, confirmaban la seguridad y eficacia de mezclar los dos antídotos a partir de un ensayo realizado a algo más de 600 voluntarios.

Desde la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitario (Semfyc) se han preguntado que si mezclar AstraZeneca con Pfizer "es tan maravilloso, ¿por qué no lo proponen con todo el mundo?". Expertos de la Semfyc han trasladado a Efe su indignación porque creen que desde el principio se debería haber dejado a estos pacientes completar su pauta con Vaxzevria, tal y como consta en su ficha técnica y recomienda la Agencia Europea del Medicamento (EMA, por sus siglas en inglés).

Pero el hecho de que ahora, cuando incluso se ha sobrepasado el intervalo aconsejado entre dosis de 12 semanas, solo puedan hacerlo firmando un consentimiento, es "el colmo del esperpento, una aberración".

Críticas de las comunidades

También las comunidades han cargado contra Sanidad por seguir aumentando la inquietud de los casi dos millones de ciudadanos que llevan semanas esperando a conocer cómo serán inmunizados, incluso aquellas que llevan semanas pidiendo que se les administrara una segunda dosis de AstraZeneca.

El consejero madrileño de Sanidad en funciones, Enrique Ruiz Escudero, ha dejado claro que su recomendación es que repitan con esta marca y ha advertido de que utilizar Pfizer en grupos para los que no estaba previsto su uso podría repercutir en toda la planificación de la vacunación.

El presidente andaluz, Juanma Moreno, ha acusado a Sanidad de generar "inquietud, inseguridad y desconfianza" en la ciudadanía al solicitar el consentimiento informado porque, a su juicio, "no tiene sentido".

Y para el gallego, Alberto Núñez Feijóo, resulta "sorprendente" que se requiera esta autorización para recibir la segunda dosis con el mismo medicamento que ya se ha recibido y no para ser vacunado con otro elaborado por un laboratorio distinto; en esta comunidad se requerirá consentimiento ya sea para recibir AstraZeneca como Pfizer.

Castilla y León ha aconsejado seguir con AstraZeneca porque "es lo que recomienda la Agencia Europea del Medicamento y la evidencia científica", tal y como ha asegurado el vicepresidente, Francisco Igea, que ha considerado que dejar en manos de los ciudadanos qué vacuna quieren inocularse genera cierta "inseguridad" en la población y es una decisión "incomprensible".

La consellera catalana de Salud, Alba Vergés, ha exigido al departamento de Darias que ponga "por escrito" que las segundas dosis de los menores de 60 años vacunados con AstraZeneca tienen que ser de Pfizer y ha lamentado el "lío" de este nuevo protocolo, ya que cree que alterará la estrategia de vacunación.

Desde Aragón, el presidente, Javier Lambán, cree "poco serio" que se les pida elegir entre este suero o el de Pfizer para la segunda dosis, pero ha insistido en que hay que hay que vacunar "como si no hubiera un mañana".

El portavoz del Gobierno Vasco, Bingen Zupiria, ha pedido este jueves "paciencia" y "tranquilidad" a estos pacientes y entiende que su situación es "complicada", si bien ha eludido explicar cuál es la postura del ejecutivo autonómico respecto a su situación.

Mientras que el consejero de Sanidad asturiano, Pablo Fernández, ha señalado que ayer dio el visto bueno en el Interterritorial porque el hecho de que se pueda elegir la inoculación de la farmacéutica Pfizer para el segundo pinchazo no influirá en la campaña de vacunación, dado que la distribución de estos sueros se produce de forma "muy rigurosa" y en cantidad "apropiada".

Por su parte, la responsable de Salud en Baleares, Patricia Gómez, ha definido como "difícil" la decisión pactada en el Interterritorial; la Conselleria de Salud y Consumo de Baleares estudia usar el sistema BitCita para que este grupo pueda elegir entre una u otra vacuna.

Cantabria mantiene de momento la fecha de vacunación a quienes recibieron la primera dosis de AstraZeneca para principios de junio y dará a elegir a estas personas si quieren repetir o no siempre que el Comité Nacional de Bioética dé su visto bueno a esta opción.