Cuarto Milenio habla de una nueva y enigmática teoría sobre la Explosión de Cádiz de 1947

El programa Cuarto Milenio habló en su programa de anoche en Cuatro de La explosión de Cádiz del año 1947, convirtiéndolo en el tema más buscado de Google en Cádiz.

Iker Jiménez contó con los testimonios de Jesús Campelo, comandante de la infantería marina, y con Fernando J. García Echegoyen, marino y analista de naufragios, que recuperaron la desgraciada historia que tuvo lugar en la ciudad, pero con un nuevo dato que contaron como un suceso sobrenatural.

En concreto es Echegoyen quien habló en el programa de un señor desconocido que "indicaba a los rescatadores de la presencia de un pozo para apagar las llamas". Pero, según contó, "este hombre desaparece y nadie lo vuelve a ver”, dicen sobre esta aparición.

Esto ocurrió cuando llevaron una motobomba a la zona de las minas donde había llamas, y al llegar no sabían donde conectar. Entonces fue cuando apareció este enigmático señor que indicó la presencia de un aljibe, "y efectivamente, excavaron sí estaba". Esto ayudó a evitar una segunda explosión.

Una presencia que identifican en los informes como un Suboficial Mayor de la Armada, "pero desaparece y nadie lo vuelve a ver tras señalar el punto concreto que nadie conocía".

El trágico suceso

El 7 de agosto a las diez menos cuarto de la noche, el depósito de explosivos de la Armada de Cádiz estalló, causando una destrucción sin precedentes.

La tragedia provocó la muerte de más de 150 personas, más de 5.000 afectados y una profunda herida en una ciudad que no acaba de salir de los destrozos, humanos, anímicos y materiales de la Guerra Civil.

La detonación fue provocada por unas 200 toneladas de trinitrotolueno, en lo que era el almacén número 1 de la Base de Defensas Submarinas de la Armada. Un estruendo que tiñó el cielo de un rojo intenso sobre la bahía de Cádiz tras escucharse la devastadora explosión y que se percibió incluso desde otras provincias.

El barrio de San Severiano de la ciudad quedó arrasado "y lo que parece estallar es la carga de profundidad de los explosivos", según cuenta Echegoyen.

Y aunque son muchas las teorías sobre la causa, entre ellas el sabotaje, no se determinó nada en la investigación, pese a la gravedad del asunto. Sí se conoce que el calor habría tenido un papel importante, así como lo antiguo del material, que llevaba cuatro años esperando para su traslado.