Pez araña en Cádiz: qué es, por qué es peligroso su veneno y cuáles son los efectos de sus picaduras

Los testimonios que atestiguan la presencia del pez araña en las aguas gaditanas aumentan. Aunque no es algo exclusivo de Cádiz. En redes sociales, en los últimos días varias personas han lamentado haber sufrido la picadura de esta especie marina capaz de fastidiar un buen día de playa.

Estos peces suelen asentarse en aguas cálidas. Si hace unos años eran más habituales en la zona mediterránea, desde hace un tiempo los puedes encontrar en Cádiz de vez en cuando. La ola de calor de este julio de 2022 no solo ha afectado a la superficie terrestre, también al fondo marino. Por lo que este pez araña se está sintiendo atraído por las aguas del Atlántico.

Qué es un pez araña

Un pez pequeño de unos 30 o 40 centímetros que se entierra parcialmente bajo la arena. Es muy difícil de detectar, ya que tan solo deja visible sus ojos y las dos aletas dorsales. Por tanto, para el bañista es casi imposible de ver y el pez responde de inmediato en cuanto la persona apoya los pies en la zona donde se esconde.

En las horas de mayor concentración de asistentes a las playas, durante el día, es cuando estos peces pasan más tiempo camuflados bajo tierra para no ser vistos por sus posibles presas. Su hora de mayor actividad es por la noche, pese a los peligros a los que se enfrenta ante la presencia de depredadores. Por eso, cuentan con unas espinas para defenderse, que con las que causan problemas a los humanos.

Por qué es peligroso y cuáles son los efectos de las picadura

Precisamente, esas espinas defensivas están cargadas de veneno. En el momento en el que algún depredador intenta atacarles, rápidamente usas sus espinas para disuadirlos. Por lo que, aunque no se tenga intención de atacar a este pez, el simple hecho de pisotearlo involuntariamente activa las alarmas de esta especie y acaba picando. Obviamente, la zona más habitual de picaduras es la planta del pie.

Las sensaciones después de haber sufrido el ataque de un pez araña son mareos, ardores y dolor intenso. Dependiendo de la cantidad de toxina que el cuerpo reciba, la reacción puede ser mayor o peor. En algunas ocasiones, personas que han sufrido la picadura han perdido el conocimiento por el dolor causado.

El tratamiento contra esta picadura consiste en aplicar agua caliente a unos 45 grados durante 30 minutos y, sobre todo, evitar el contacto de la piel con algo frío. A su vez se recomienda no aplicar torniquetes, no succionar el veneno bajo ninguna circunstancia y retirar con cuidado las espinas clavadas que estén visibles. Por supuesto, acudir a un centro sanitario para recibir atención médica especializada es de lo primero que ha de hacerse.