La hermosa arquitectura que envuelve esta ciudad está rociada de palaciegos edificios que son herencia de la edad de oro gaditana. Hay más de 60 casas palacios, según el estudio 'Palatia' de un grupo de investigadores de la UCA, y aquí le presentamos solo algunas de estas joyas, muchas de ellas convertidas en apartamentos turísticos y hoteles.
1/7La casa palacio de los Mora de los Moreno de Mora es una hermosa finca residencial particular que es visitable -aunque de manera concertada- y se sitúa en la calle Ancha. Es una finca decimonónica de estilo isabelino, alberga interiores deslumbrantes y un patrimonio artístico material exquisito./Jesús Marín
2/7La casa palacio de Sagasta, 1, exquisitamente restaurada y convertida en hotel de cuatro estrellas, es un edificio cargado de historia. Fue sede del consultado y de la embajada británica, que se mantuvo allí hasta finales del siglo XIX y presenta una hermosa fachada de balconada isabelina y piedra ostionera./ACPS
3/7La casa palacio El armador es un bonito edificio de apartamentos turísticos construido originariamente en el siglo XIX en la calle Ancha. Alberga un patio típicamente andaluz, fuente y un original jardín vertical./Julio González
4/7La Casa Palacio Aramburu (S. XVIII) también nació del floreciente comercio local con América. La planta baja fue dedicada a la sede de la banca Aramburu, siendo los pisos de arriba alojamiento de la familia. Fue reformada en 1909 dándole un aire ecléctico modernista y regionalista. Actualmente acoge eventos socio culturales/Jesús Marín
5/7La casa palacio Veedor, recientemente restaurada y convertida en suites turísticas, se sitúa en la misma calle y toma el nombre del funcionario que fiscalizaba la carga de los barcos que hacían la ruta de las Américas en el siglo XVII./Lourdes De Vicente
6/7Sita en el número 8 de la calle Beato Diego, tiene un gran valor oculto tras sus potentes muros vinculada a una leyenda de un marino que regresó colmado de oro y nunca volvió a embarcar, por lo que se erigió esta casa en el XVIII con guiños a una embarcación. Sorprende su bella escalera de caracol y tiene singulares balcones al patio. Sus propietarios han intentado en más de una ocasión ponerla en valor asumiendo la relevancia urbanística que tiene./Julio González
7/7La Casa del Almirante, en la plaza de San Martín, es una casa palacio barroca que se construyó gracias al comercio indiano de la ciudad a finales del siglo XVII por la familia del almirante de la Flota de Indias, Diego de Barrios. Impresiona su bella portada con columnas de mármol y actualmente es un proyecto de hotel./Lourdes De Vicente