Análisis
Santiago Carbó
Algunas reflexiones sobre las graves consecuencias de la DANA
El Tiempo
Las lluvias han sido recibidas con ilusión en una provincia donde el mal tiempo suele ser impopular. La sequía y la falta de precipitaciones es tal que los gaditanos han acogido de buena gana que en los últimos días haya llovido prácticamente en cuatro de siete días.
En comparación con los números que presentaban los embalses en noviembre de 2021, de un año para otro se han perdido 120 hectómetros cúbicos. En 2021, el volumen almacenado era de 535,91 hectómetros cúbicos y este 2022 es de 415. En porcentajes, se trata de un 22,8% menos. De ahí que la llegada de las precipitaciones llamara al optimismo, para que esta tendencia negativa se frenara.
Sin embargo, la recompensa no ha sido como se esperaba, los embalses apenas han mejorado. De una semana para otra, tan solo un hectómetro cúbico más. Algo que no alivia para nada la situación. De una semana a otra, se ha pasado de 414 a 415 hectómetros cúbicos. A fecha de hoy, 22 de noviembre, el lleno en las reservas gaditanas es del 22,79%, mientras que el año pasado año por la misma época se estaba al 29,38%.
Los embalses en peor situación de la provincia, por estar más cerca de quedarse sin agua, son los siguientes:
Después, los que están en mejores circunstancias son otros pantanos cuyo impacto, por su baja capacidad, es mucho menor que tres de los mencionados en la lista de arriba. Por ejemplo, el embalse de Arcos está lleno al 84,59% pero resulta que solo puede acoger 14,60 hectómetros cúbicos. Algo parecido pasa con el Almodóvar, de 5,68 hectómetros cúbicos y que está al 55,46%.
Por el contrario, el más importante la provincia por dimensiones, el de Guadalcacín, se encuentra al 24,75% de sus 800,30 hectómetros cúbicos.
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