La sartén de cocina sobre la que advierte la OMS por contener sustancias cancerígenas

La Organización Mundial de la Salud aconseja que si en las cocinas aún se tienen cierto tipo de sartenes, mejor dejarlas en la basura. El tipo de material con el que están hechos estos útiles es la razón principal. Al ser objetos que entran en contacto directo con los alimentos a consumir, cada vez se pone más el foco en los materiales de una sartén o de una olla.

Aunque estos utensilios ya se retiraron del mercado hace unos años, muchas personas pueden seguir manteniéndolas en sus cocinas. De ahí que la OMS advierta sobre sus peligros. Concretamente, son las sartenes que contienen  perfluorooctanoico (PFOA), sustancia calificada por el organismo como cancerígena para los humanos. Sobre todo, está presente en las sartenes antiadherentes. El perfluorooctanoico es un compuesto químico perteneciente a los perfluoroalquilados. Estos son definidos como unos químicos eternos que perduran en el cuerpo humano y en el medio ambiente.

En 2020, la Unión Europea prohibió la comercialización de cualquier tipo de objeto de cocina con PFOA. Su relación con el riesgo de cáncer fue determinante. A su vez, afecta a desarrollo de sistema reproductivos e inmunológicos, causa daños en hígado y riñón y altera el metabolismo. La forma de comprobar que una sartén no tiene este componente es mirando en su etiqueta. En ella, se debe especificar "sin PFOA". En cualquier caso, las más recomendable son de hierro, acero inoxidable o cerámica.