¿Una segunda ola de calor en Cádiz? La Aemet da una posible fecha de inicio

La llegada del verano suele venir acompañada con temperaturas muy altas en los termómetros. Ya es costumbre repetir de manera continua una y otra vez el término 'ola de calor' aunque no todos los fenómenos meteorológicos donde se dan temperaturas extremas se pueden clasificar como ola de calor. Para que se cumpla este requisito, deben darse como mínimo unas características: que la duración mínimas de esos registros sea de tres días y que superen el 5% de las máximas registradas en años anteriores de la zona territorial. Del registro histórico de la Agencia Estatal de Meteorología, el verano más caluroso de España fue el de 1981, consiguiendo en el 2022 superar sus máximas.

La última semana de junio registró la primera ola de calor de 2023 y casi sin tiempo de recuperación, los expertos ya están vaticinando cuando se volverá a repetir este fenómeno. Tan sólo han pasado los primeros cinco días del mes y ya se han vivido episodios de calor extremos. Concretamente el lunes 3, en algunas zonas de Andalucía se llegaron a registrar cerca de los 40 grados como sucedía en Andújar o en Córdoba. Mientras que en zonas como Valencia, se podían ver fuertes granizos que precipitaban sobre la zona del Este peninsular.

Ante la variación tan radical de las temperaturas en el país, era previsible la llegada de una segunda ola de calor de manera casi repentina. Así lo empezaban a anunciar en la cuenta de Twitter de Aemet: "Probable ola de calor durante varios días en áreas del interior de Andalucía a partir del próximo domingo o lunes. Habrá que ir concretando los valores máximos esperados de temperatura. Discrepancia todavía entre la versión determinista y probabilística..."

Temperaturas extremas en el interior de Andalucía

Según la tradición, del 15 de julio al 15 de agosto las temperaturas se suelen intensificar llegando a alcanzar temperaturas de intenso calor. Este año se han adelantado los acontecimientos y en esta segunda ola algunos expertos, a través del modelo probabilístico, aseguran que se podrán disparar los niveles del mercurio, llegando a alcanzar incluso una temperatura que roce los 49 grados en zonas de interior de Andalucía. Otros determinaban que la temperatura máxima llegaría a ser de 45 en algunos territorios y otros, que las máximas no superarían los 43 grados.