Principios para la buena convivencia

La guía elaborada por Procasa incluye lo que denomina como “principios rectores para la buena convivencia”. Aquí incluye desde el respeto “por la diversidad de opiniones, pluralidad de ideas y diferencias individuales”, a la tolerancia. Igualmente defiende la honestidad y la responsabilidad “en el cumplimiento de lo comprometido o asignado”. Reclama la solidaridad “basada en la comprensión de las necesidades” del prójimo, y la empatía “para comprender los sentimientos y emociones, que hace que las personas se ayuden entre sí y es vital para la vida social”. Y junto a ello, la expresión emocional, la cooperación y el pensamiento crítico, reflexivo y divergente, con el que se evita “el conformismo, la pasividad y la indiferencia”.problemas

Causas que generan conflictos y malas convivencia en el parque público de viviendas.

El estudio de Procasa analiza también las situaciones más comunes de tensión o conflicto en las comunidades vecinales. Así, se incluyen cuestiones por falta de pago de cuotas. Aquí, quienes pagan se rebelan contra no cumplen y disfrutan del mantenimiento y orden del edificio. Por el mal uso de las zonas comunes: que va desde el mal uso de los ascensores, ensuciar las zonas comunes o utiliza estas espacios para el depósito de enseres. Ruido en el interior de las viviendas. Mantenimiento deficiente de las viviendas, que puede provocar malos olores o la presencia de insectos. Falta de colaboración en las actividades comunitarias, como la limpieza de escaleras o la negativa a desempeñar cargos cuando le corresponda. Realización de actividades molestas o ilícitas dentro de la vivienda, como drogas o prostitución. Actividades ilícitas contra la comunidad, como el enganche de suministro eléctrico de zonas comunes. Y alteración del ambiente social, con insultos, vejaciones, vandalismo entre vecinos...normas

Derechos y deberes de las personas inquilinas que viven de arrendatarios

La guía incluye también los derechos y deberes que tienen todos los residentes en la viviendas municipales. Así está el derecho a una buena convivencia, a ser tratada con respeto y tolerancia y a utilizar el diálogo ante posibles problemas y desavenencias. Derecho a ser convocada y participar en las juntas vecinales. Derecho a conocer los presupuestos y cuentas anuales. Derecho a solicitar una junta vecinal que estudie y decida sobre algún asunto de interés. Derecho al descanso y a la tranquilidad. Derecho a usar los elementos y zonas comunes, sin pertubar el uso normal al resto del vecindario. Derecho a la reparación, conservación y mantenimiento de elementos y zonas comunes.En cuanto a los deberes, está el de autorizar la entrada a la vivienda a personal de Procasa para realizar obras de mantenimiento del edificio. Deber de comunicar a Procasa cualquier uso indebido, ilícito o contrario a norma, identificando a la persona autora del mismo. Deber de comunicar la ejecución de obras no autorizadas en zonas comunes o privativas del edificio. Y deber de deshacerse de enseres a través del servicio municipal.