Sobre el edificio ‘Filipinas’
Tribuna
El autor ahonda en la historia arquitectónica de la finca de la calle Cristóbal Colón, con dos planos de la fachada datados en el siglo XIX
A propósito del artículo de Juan Antonio Fierro Cubiella sobre el salón de baile ‘La Filipina’, publicado en el Diario del 14 de marzo, me complace aportar algunos datos.
En el Archivo Municipal se conservan dos planos de fachada del edificio. El primero, de 1856, lo firman el maestro de obras José Armario y su propietario Benito Cuesta. Sobre el margen lateral del plano se escribe una diligencia municipal firmada por Adolfo de Castro: “En cabildo de hoy fue aprobado este plano por el Excmo. Ayuntamiento. Cádiz, 26 de abril de 1856”.
José Armario se gradúa en 1836 y fue maestro mayor de la ciudad en los años 40. Su actividad privada queda reflejada en el Archivo Municipal de 1848 a 1862. En este último año reforma en estilo isabelino la fachada de la casa número 11 y 12 de la calle de la Aduana, luego hotel Roma.
En el edificio de Cristóbal Colón destaca el tratamiento abierto mediante columnas en la planta baja, solución que mejora la accesibilidad cuando se trata de comercios u otros usos públicos, y que empieza a utilizarse por estos años en la ciudad.
En 1851, Pascual Olivares ya había utilizado profusamente este sistema en la casa número 25 actual de la calle San Francisco, cuyas 8 columnas de mármol deben proceder del patio menor del convento de San Agustín, que ocupaba la parcela en la que luego se alza esta casa. La extensión del convento, con ambos patios, se aprecia en algunos planos generales del Casco de comienzos del siglo XIX.
Justo enfrente del edificio de ‘La Filipina’, se construye en 1860 un notable edificio con la planta baja de columnas, el actual número 14, por el arquitecto Isaac Nessi y Artola.
El segundo plano archivado de Cristóbal Colón, 17 se enuncia como ‘Proyecto de reforma de la fachada’, añadiendo una planta más con la misma composición, delineada en rojo como era usual para indicar las reformas, y cierros en los huecos laterales de las plantas 1ª y 2ª. Destaca sobre las columnas el rótulo ‘FILIPINAS’.
Este plano lo firman el maestro de obras Pablo Arduña, activo de 1857 a 1878, y Benito Cuesta. En las guías Rosetty aparecen Benito y José Cuesta y Blázquez como “propietarios”, con domicilio en calle San José, 31. La aprobación municipal, de 22 de julio de 1864, la firman el alcalde corregidor presidente P. Víctor, el secretario Adolfo de Castro y el arquitecto titular Manuel García.
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