De andar por casa: una vivienda sostenible y elegante en Tarifa

Cádiz/Hoy recorremos una original casa en Tarifa. Su propietaria, la directora creativa escocesa Clare G. Macintyre, que tiene ascendencia española por vía paterna, conoció esta localidad en 2015. Tras venir varias veces decidió comprar una propiedad y cambiar su residencia de la capital inglesa y de las Tierras Altas de Escocia donde vivía por Tarifa. Actualmente vive entre la ciudad gaditana y pasa temporadas en la capital londinense y en la casa familiar en el norte de Escocia. 

Este espacio tarifeño que la propietaria adquirió ocupa 100 metros repartidos en 4 alturas. La planta baja es la cocina, la primera planta es el salón-comedor, dormitorio principal y baño; la segunda planta la ocupa un dormitorio con su baño y la tercera se ubica la terraza con vista a la fortaleza de los Guzmanes y a Marruecos. Todas estas dependencias reciben la luz natural a través de sus ventanas exteriores.

Su propietaria, tras adquirir el inmueble, hizo una gran reforma abriendo todos sus espacios y distribuyendo sus estancias dependiendo de sus necesidades familiares. Tras 8 meses de reformas lo convirtió en un bonito espacio dominado por la luz del exterior y por su decoración limpia y abierta.

Una puerta azul con un aldabón adquirido en India da la bienvenida a la entrada de la casa. Tras tres peldaños y una pequeña entrada se llega a la cocina. Este espacio combina el microcemento de las encimeras con el barro de su suelo. En toda su distribución se ha aprovechado hasta el máximo su espacio. Para el almacenaje se ha diseñado unas bonitas puertas de madera. En una de sus paredes cuelga una repisa donde descansa diferentes piezas de menaje de cerámica. Como elemento decorativo y haciendo un guiño a su origen escocés una de sus encimeras la ornamenta una pareja de candelabros de bronce. Cestas de gran tamaño de mimbre, de Marruecos, decoran algunos de sus espacios.Una escalera comunica con la planta superior donde se encuentra el salón-comedor y dormitorio principal con su baño. 

El salón lo preside una mesa de madera vista, la cual se apoya sobre una estera. A ello le acompaña un sofá de palillería de mambú y otro sofá que ha sido tapizado por su propietaria en lino beige y crudo. Piezas de la ceramista tarifeña Mon Ruiz Díaz ornamentan la hornacina de este espacio. Un chubesqui limita el espacio del salón con el comedor. 

En el comedor se ubica una mesa circular vintage con tapa de mármol y pata de hierro. A ello le acompaña una pareja de sillas Thonet en color madera y otra original silla en diferentes alturas. Dos cestas de ratán, adquirida en Senegal, se utilizan como elemento decorativo. Unas bonitas puertas antiguas de pino comunican con el dormitorio principal.

Este dormitorio lo preside una pintura de la artista británica Alison Johnson, que se ubica, en la parte superior de la cama. En sus laterales dos taburetes de enea y madera comprados en Marruecos se utilizan como mesa de noche. Dos originales lámparas de barro que cuelgan del techo se utiliza para iluminar esta estancia. El lugar donde se ubica el vestidor se cubre con una tela de lino natural. 

El baño de esta estancia emplea el microcemento tanto en sus paredes como en el suelo junto con un bonito lavabo de piedra. Como objeto decorativo cuelga en una de sus paredes un cuadro de la artista británica Nan Frankel.

Otra escalera desde esta planta comunica con la superior donde se ubica un dormitorio y un baño en un espacio abierto donde recibe toda la luz exterior a través de sus ventanales. Y subiendo las escaleras de esta estancia se llega a la terraza una de las zonas más frecuentadas en verano. En ella se ha instalado un cenador para disfrutar de sus noches de verano con sus vistas a Marruecos y a la fortaleza medieval de los Guzmanes.Todo lo descrito tiene su vista al Atlántico, Mediterráneo y Marruecos.