La Casa Lazaga de San Fernando ya cuenta con un proyecto de rehabilitación

San Fernando/La Casa Lazaga cuenta ya con un proyecto de rehabilitación cuyo coste se estima en unos 2,7 millones de euros, una inversión que superará los 3 millones, reconoce la alcaldesa, Patricia Cavada, puesto que que también atenderán las recomendaciones de los redactores: la instalación de una montera para el patio principal y la recuperación de algunos elementos singulares. La intervención opta a una subvención de fondos europeos Next Generation vinculados a eficiencia energética.

La regidora ha explicado qué contempla el trabajo recibido hace unos días de Pujol y Cruz Arquitectos, redactores del proyecto, ante representantes de colectivos y ciudadanos que en estos años han mostrado su interés por este histórico inmueble propiedad municipal desde hace más de 20 años. "Sois personas que durante mucho tiempo habéis interactuado con el Ayuntamiento o conmigo mostrando vuestro interés por la recuperación de este edificio y hemos querido compartir con vosotros este momento", ha manifestado.

La transformación que se planea prevé la recuperación de la tipología de la casa palacio del siglo XVII propia del periodo de transición barroco-neoclásico. La intervención pretende mantener los muros, recuperar el patio principal "como uno de los elementos más representativos", conservar los elementos neoclásicos como la escalera imperial o la fachada y su almohadillado para también preservar los elementos del periodo isabelino. La galería superior y la carpintería de madera también serán atendidos para volver a su esplendor.

"No cabe otra que recuperar aquellos elementos que le dan un mayor valor patrimonial al edificio", defiende Cavada. Uno de los paneles colocados en el patio central para la visita recogía precisamente un catálogo de estos elementos que se restaurarán. Los cielos rasos con ornamentación en distintas ubicaciones de la casa, espacios singulares como el zaguán, la capilla, la escalera principal o el salón principal de la primera planta son algunas de las piezas sobre las que se intervendrá.

Las fachadas también serán objeto de labores, aunque el frontal hacia calle Real ya ha sido tratado durante las obras de consolidación. Esta tendrá además iluminación ornamental, para "distinguir" y dirigir la atención hacia la casa. La cerrajería actual se recuperará y se sustituirá la carpintería, "siempre de la manera más respetuosa con el edificio".

En el aljibe del sótano se recuperará la bóveda a fin de que el espacio se pueda utilizar para la colocación de las distintas instalaciones. No hay que olvidar que la Casa Lazaga se convertirá en el segundo edificio administrativo, según los planes del gobierno. De ahí que se tenga igualmente que adaptar a este uso. La idea es que acoja dos delegaciones municipales, una mayor y otra más pequeña. Se parte de la intención de que sea Desarrollo Urbano y Desarrollo Sostenible, pero esto podría variar, aclara la alcaldesa.

En la planta baja, con entrada desde calle Real, se situarán los espacios de atención a la ciudadanía. Al lado derecho, se dispondrán los despachos técnicos de la delegación mayor y a la izquierda los de la delegación menor, además de aseos y de disponer de ascensor. La primera planta será para esa delegación mayor, con la posibilidad de despachos para dos delegados. "Desarrollo Urbano tiene un delegado de Urbanismo pero también otro de Mantenimiento Urbano", pone de ejemplo Cavada para argumentar esta opción. Además de más despachos técnicos, habrá una sala de juntas y una sala de delineación.

El edificio cuenta con una altura (baja más primera) por la fachada de la calle Real pero se convierte en dos alturas (baja más dos) por la fachada posterior, la que da a la calle Mayorazga. Eso se debe al desnivel de la propia ciudad, lo que hace que el patio ajardinado de la trasera continúe hacia una planta baja que es un sótano desde la otra perspectiva. En este sótano está el aljibe mencionado donde se podrán las instalaciones y las estancias para los archivos.