Fábrica San Carlos, la última gran recalificación de suelo en San Fernando

San Fernando/La Isla tiene un viejo tema pendiente con los 132.614 metros cuadrados que ocupaba la antigua Fábrica de San Carlos, la última gran recalificación de suelo que se acometió en La Isla en una compleja operación urbanística ligada a la liquidación de la antigua Constructora Naval y al pago de las indemnizaciones a los últimos 180 trabajadores de la extinta factoría.

El convenio urbanístico que el Ayuntamiento isleño suscribió con Sogescar, la sociedad mixta participada por la Empresa Municipal de Suelo (Esisa), Unicaja (inmobiliaria Acipino) y la constructora Sando, para afrontar el desarrollo de estos suelos tras el cambio de uso –de industrial a residencial– se remonta al año 2001. Acaba de cumplir la friolera de 22 años.

Sin embargo, a pesar del tiempo transcurrido, ese desarrollo todavía se sigue esperando. Lo que fuera FSC sigue siendo el solar más grande de San Fernando, una amplia extensión de terreno que se extiende entre La Casería y la población naval de San Carlos en la que todavía resultan perfectamente visibles los últimos vestigios de la antigua factoría.

Ahí está prevista desde hace años la construcción de 850 viviendas en edificios de seis y ocho plantas repartidos en 9 parcelas diferentes. De ellas, un mínimo de 259, distribuidas en tres de esas parcelas, deben ser protegidas.

Se calcula que este desarrollo –que junto al de la Huerta de la Compañía (Camposoto), es uno de los más potentes previstos en San Fernando a pesar del tiempo que se lleva esperando– supone la construcción de nueva vivienda para 2.040 habitantes.

Hay además una parcela de uso terciario dotada de 3.941,04 metros cuadrados que tiene calificación hotelera y que contempla la construcción de un establecimiento de hasta 8 plantas de altura (más baja).

Por la zona, además, pasan a diario numerosos isleños para pasear o hacer deporte dada su proximidad a la playa de La Casería y a los polvorines de Fadricas, lo que incluso articula una ruta oficiosa por todo el borde noroeste de la localidad. También, lamentablemente, en estas parcelas que llevan más de dos décadas a la espera de que se materialice la construcción de esas 850 viviendas se acumulan escombros y basura arrojada junto a los pocos muros y restos de edificaciones que quedan de FSC y la maleza crece descontroladamente.

Pero, aunque la espera resulta excesivamente larga, en este último año –y después de un larguísimo parón– se han dado importantes avances que despejan el camino para ese desarrollo urbanístico. La Junta de Gobierno Local dio en el pasado mes de abril su visto bueno a la aprobación definitiva del proyecto de urbanización de los suelos. Y el 24 de mayo –apenas unos días antes de las elecciones municipales– el Boletín Oficial de la Provincia (BOP) se hacía eco de dicho acuerdo.

Así que el siguiente paso será tramitar la constitución de la junta de compensación, que es el sistema de actuación que se utilizará para afrontar el desarrollo, y proceder a la ejecución de las obras de urbanización por parte de Sogescar una vez que ya existe un proyecto de reparcelación, según informaba el Ayuntamiento isleño allá por 2021.

No obstante, tal y como se especifica en el informe de sostenibilidad financiera del Plan Especial de Reforma Interior (PERI) de San Carlos que aprobó el pleno de la Corporación Municipal en mayo de 2020, "para el sector se prevé una sola etapa para la ejecución de las obras de urbanización con una duración de 3 años a contar desde la aprobación definitiva del proyecto de urbanización". Eso sí, también se habla de simultanear las obras de urbanización y de edificación. En todo caso, la cuestión es si por fin ha llegado el momento de los suelos de FSC después de más de 20 años de espera.

La tramitación urbanística del proyecto de urbanización, que se ha llevado a cabo a lo largo del último año, ha coincidido en el tiempo con los avances que ha experimentado otro de los suelos de San Fernando que en los próximos años prevé registrar un mayor desarrollo residencial. Se trata de la Huerta de la Compañía, en Camposoto, donde está prevista la construcción de casi 900 viviendas. La aprobación definitiva del plan parcial se publicó en el Boletín Oficial de la Provincia en el pasado mes de julio.