El vecino de San Fernando que llegó a superar los 300 kilos consigue levantarse de la cama después de un año

San Fernando/Casi seis meses lleva ingresado en el hospital Puerta del Mar José María Fernández después de su sonado traslado, que se hizo con la ayuda de los bomberos. Tuvieron que sacarlo de la casa con la ayuda de la autoescala y tras diseñar y fabricar una estructura previa que permitió sacarlo por el balcón del domicilio. La noticia tuvo una repercusión enorme.

Por entonces, José Mari llevaba ya un año sin pisar la calle. Su caso se había conocido en abril cuando se supo de su estado: con más de 300 kilos de peso, vivía postrado en la cama desde hacía unos tres meses. Sin apoyo familiar, tenía que conformarse con las horas que, como persona dependiente, tenía asignadas del servicio de ayuda a domicilio. Además, su precario estado de salud se agravaba con la elefantiasis que padece en una pierna.

Ahora, José Mari lleva más de 190 días hospitalizado y tratándose. Ha conseguido bajar de los 200 kilos, aunque no sabe exactamente su peso porque la báscula de la cama especial para personas con obesidad mórbida que le ha habilitado el SAS se ha estropeado. Su aspecto ha cambiado drásticamente. Su estado de salud ha mejorado y también su ánimo. "Soy otra persona diferente", reconoce. "Me ha cambiado la vida".

Y todavía tiene un largo proceso de recuperación por delante mientras espera la cirugía bariátrica que tienen que practicarle para tratar su obesidad mórbida. Por lo que le cuentan los médicos, no cree que vaya a salir del hospital antes de verano. Por ahora tiene que seguir perdiendo peso para poder meterese en el quirófano.

"Me ha cambiado la vida"

Pero en ese largo proceso de recuperación, José Mari ha conseguido superar un nuevo hito que le llena de orgullo: ha conseguido levantarse de la cama por primera vez en aproximadamente un año. Gracias, claro está, a la pérdida de peso, a los cuidados médicos y a la fisioterapia y rehabilitación. Y también, por supuesto, a su constancia y a su afán de superación, que le hizo replantearse su vida antes de su traslado al Puerta del Mar con la ayuda de algunos voluntarios que acudieron a su casa al conocer su situación.

José Mari empezó ganando cada vez más movilidad para manejarse en la cama (incorporarse, moverse de lado...) y el paso siguiente ha sido sentarse y levantarse sin ayuda, como él mismo ha puesto de manifiesto en un vídeo que ha compartido. "Todavía no he andado, pero lo haré", afirma convencido José Mari. "Lo siguiente será dar paseos por el pasillo del hospital".