Los proyectos EDUSI de San Fernando, pendientes del plazo límite del 31 de diciembre

San Fernando/El Ayuntamiento de San Fernando confía en que habrá una nueva prórroga o que desde la administración se articulará otra fórmula para poder continuar los proyectos financiados con los fondos europeos EDUSI (Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrado), cuyo plazo límite expira el próximo 31 de diciembre, dentro de menos de 6 meses.

"Es el escenario que manejamos", ha afirmado con rotundidad el concejal de Desarrollo Económico, Conrado Rodríguez, al aludir a la situación que se le presenta al Consistorio, dado que los principales proyectos EDUSI -entre ellos, el Parque de La Magdalena, que lleva un año paralizado- distan mucho de estar acabados para esa fecha. Con suerte, para entonces se espera que se hayan podido reanudar los trabajos una vez que se haya aprobado el modificado de obra que ahora se está tramitando.

Y a esta actuación se suman otros proyectos financiados en parte por la EDUSI -las ayudas concedidas ascienden a 10 millones de euros, a los que se suman 2,5 que aportaría el Ayuntamiento isleño- como el paseo de la trasera de La Almadraba o el nuevo equipamiento náutico previsto en Gallineras, cuyas obras quedaron desiertas en el proceso de licitación.

El Ayuntamiento de Cádiz, no obstante, aseguró este martes que tendrá que "devolver" hasta 3,1 millones de euros de los fondos EDUSI y que habrá proyectos que no se van a poder ejecutar porque el plazo límite expira el próximo 31 de diciembre.

En La Isla, sin embargo, confían en una nueva prórroga o fórmula similar. La situación en la que se encuentra San Fernando no es muy diferente a la que presentan la práctica totalidad de los ayuntamientos que se beneficiaron de los fondos EDUSI de 2016, según Conrado Rodríguez.

"Hay un elevadísimo porcentaje que está igual, con un gasto comprometido muy alto y un nivel de ejecución de proyectos relativamente bajo", asegura. Por eso, el ejecutivo está seguro de que se articulará "una solución" que permita seguir adelante con los proyectos en marcha.

Lo contrario supondría perder millones de ayudas europeas concedidas hace 7 años para desarrollar proyectos sostenibles y de transformación de la ciudad, en el caso de San Fernando en la franja este de la localidad.

Y eso, sostiene el concejal de Desarrollo Económico, no solo supondría un durísimo golpe para muchos ayuntamientos sino que incluso resultaría contradictorio en un momento como en el actual en el que se prodigan las ayudas europeas y se prepara incluso la llegada de nuevas convocatorias dotadas de cuantías más elevadas. Por eso, insiste, no cabe otro camino que la prórroga u otras fórmulas que permitan seguir adelante, "porque la situación de los EDUSI es algo generalizado".

No hay marcha atrás en la obra de La Magdalena, pase lo que pase

De hecho, apunta el edil socialista, en el caso de que haya proyectos ya iniciados, el gasto ya está comprometido por la administración local y hay un contrato de obras, por lo que los ayuntamientos están obligados a hacerles frente, "lo que podría llegar incluso en algunos casos a poner en riesgo las nóminas", advierte. No es la situación de San Fernando, aclara.

En La Isla, aún si se perdiera la financiación EDUSI, el Consistorio tendría capacidad económica para afrontar en solitario la obra de La Magdalena, asegura. De hecho, para el ejecutivo municipal el proyecto del parque urbano -aunque ahora está paralizado- no tiene marcha atrás pase lo que pase con la estrategia y con los plazos que expiran el próximo 31 de diciembre.

Los fondos europeos, se afirma, son solo un medio y no el fin que se persigue, que no es otro que acometer la transformación de toda la zona con el mayor parque urbano de la Bahía. Eso sí, nadie niega que sería un durísimo golpe perder la financiación de estos fondos europeos.

Aunque en el Ayuntamiento isleño están seguros de que eso no va a pasar, porque los retrasos en las obras y en la tramitación de los proyectos -se insiste- no son un caso aislado de San Fernando. Y son muchos los factores que han influido en esta demora generalizada: la excesiva complejidad de los procedimientos fijados en la estrategia, que ha demorado cada trámite que había que formalizar; la pandemia y todas sus consecuencias, la subida de precios y la inflación, que se ha notado especialmente en las obras...

"No ha sido nada fácil para los ayuntamientos", afirma el responsable de Desarrollo Económico. "Además, nosotros hemos apostado desde un primer momento por proyectos como La Magdalena que entrañan también complejidad porque son verdaderamente transformadores de la ciudad, pero eso es algo que hemos hecho por convencimiento".

La Magdalena sería de hecho la única actuación iniciada (aunque ahora mismo esté paralizada). El resto de los grandes proyectos, ya sea el paseo de la trasera de La Almadraba o el equipamiento náutico previsto en Gallineras, no ha conseguido aún pasar de los trámites previos.

Igual que el tranvía

Las ayudas, aclara Conrado Rodríguez, se conceden a partir de certificaciones de obra al alcanzar determinados hitos durante la ejecución del proyecto, por lo que el Ayuntamiento no tendría que devolver nada. Eso sí, de no mediar una nueva prórroga u otra solución perdería la financiación con la que cuenta desde hace 7 años para desarrollar estos proyectos.

En el caso de la obra de La Magdalena, aunque la obra está iniciada, no llegado a recibir ninguna partida de los fondos EDUSI dado que la actuación se frenó cuando tan solo llevaba en marcha un par de meses.

La actuación, que se lleva la mayor parte de los fondos, se adjudicó por 7,3 millones de euros, si bien el modificado del proyecto en el que se trabaja -y que asumirá íntegramente el Ayuntamiento- asciende a más de 1,5 millones, por lo que el coste final de la actuación superará los 9 millones.

Para el delegado de Desarrollo Económico, la situación se asemeja mucho a lo ocurrido con el proyecto del tranvía, del que también se dijo en 2019 que tendría que devolver a Europa hasta 125 millones de euros, lo que finalmente no ocurrió. "Se buscó una solución", advierte. Lo contrario, insiste, no tendría sentido.